Abdel retoma su reinado ganando el Oro.

Manuel Griñán.

• Fotos de Miguel Ángel Tejado.

La Copa de Oro 2013 no decepcionó en absoluto y nos deparó una preciosa recta entre el campeón Abdel y el aspirante Celtic Rock saldada con triunfo para el del Duque de Alburquerque, que volvió así a su valor francés de Grupo y desmintió sus últimas actuaciones en las que se le había apreciado cierta desgana. Celtic Rock cumplió con creces, marcando el ritmo como se esperaba sin que nadie le entorpeciera en todo el recorrido. Llegó, por tanto, a la recta final únicamente con el desgaste que se supone en una prueba de este nivel disputada a ritmo de récord, que no es poco, y presentó su progresivo ataque, estilo Induráin, que fue suficiente para tumbar a todos los aspirantes excepto a uno. Abdel, que había sido magníficamente contenido por Janacek de arranque (ya conocemos su tendencia a tirar) y que había trazado una curva perfecta al acecho del conductor, resistió el severo paso y se fue a su estela nada más abordar la recta. La carrera se decidiría a punta de velocidad. Y al Abdel de hace unos meses es muy difícil ganarle en el sprint, especialmente si éste llega cuando las fuerzas están muy justas. En primavera Celtic Rock consiguió repeler su ataque para birlarle el premio Duque de Alburquerque, pero todos recordamos aquellas exhibiciones del hijo de Dyhim Diamond en la recta de La Zarzuela antes de su aventura francesa en la que llegó a ganar Listed, colocarse en Gupo y marcar un valor galáctico. Así que, esta vez, el alazán de José Carlos no pudo aguantarle y tuvo que conformarse con un segundo puesto que pone fin a una racha de siete victorias consecutivas. Su derrota, sin embargo, fue también la mejor actuación de su vida y la confirmación de un magnífico valor que da para pensar en aventuras suprapirenaicas. Avante fue el mejor del resto y obtuvo el bronce por delante de Esles, que salda su segunda incursión en San Sebastián con mucho mejor resultado que el pasado año, aunque tal vez no sea su pista predilecta. El resto llegó lejísimos, lo que habla bien a las claras del ritmo al que se corrió esta Copa de Oro. 2’ 25” 95, récord de la distancia en nuestro país. Matrícula de honor para los dos primeros. Una gran carrera.

Grande y atípica. Porque resulta inusual que los dos primeros sean ejemplares venidos de la milla. Caballos cuya principal incógnita de la carrera circulaba en torno a la aptitud a los 2.400 metros. Cuando hay calidad la distancia pasa a un segundo plano, especialmente en una pista suave como la de Lasarte. Pero no se corre tan deprisa si no haces la distancia. En este caso estamos hablando de algo más que clase, de la que Abdel tiene mucha. Inscribe su nombre en el palmarés de una prueba que ya ganó su abuelo materno hace un cuarto de siglo y mejora el resultado obtenido hace un par de años cuando, siendo aún un bebé, acabó segundo del visitante Jo All The Way.

Magnífica monta de Janacek al ganador, beneficiándose así de un inopinado triunfo producto de la lumbalgia que trae por la calle de la amargura a Álvaro Gómez. El checo es muy bueno y, a pesar de no conocer a un caballo que no es precisamente fácil de montar, supo taparlo de inicio y evitar el desgaste inicial. Luego supo conservar la cuerda, asegurando que el de Alburquerque no corriera ni un metro más de los 2.400 que marca la distancia oficial, dobló magníficamente y no tuvo que tirar en ningún momento para presentar su ataque por la calle tres, evitando así el cuerpo a cuerpo con Celtic Rock. Joanes Osorio gana por tercera vez la carrera (aunque con King Cobra figuraba como preparador Diego Martínez y con Glauco, Trujillano) y consigue además el tercer puesto con Avante. Viaje más que lucrativo a Lasarte. Tendrá ahora la difícil pero agradable tarea de tener que diseñar programa futuro para sus pupilos. Con Abdel todas las puertas se abren.

Australia Day corrió dignamente pero en una edición como la de este año no le fue posible cobrar. Su principal objetivo sigue siendo el Gran Premio de San Sebastián. Pepito Grillo tampoco lo hizo mal, mientras que Sleeping Wan defraudó. El de Martul está aún muy tierno para este tipo de compromisos y quizá debiera seguir transitando por las carreras de clásicos antes de volver a confrontar a los viejos cuando adquiera la madurez suficiente.

Madurez que parece haber alcanzado Brindos, un tardío ejemplar que lleva una senda imparable desde hace unos meses. Janacek dijo tras su anterior victoria que podía ser de gran premio y el de Santa Bárbara ha respondido con su tercer triunfo de una tacada en la consolación de la Copa de Oro llamando así a la puerta de mayores empresas. Superó en el remate al belicoso Go Parti, que pareció más centrado en esta ocasión, pero tampoco se crean que mucho más, y planteó batalla hasta el mismo poste de meta. Ranyan pescó el tercer puesto ante el desfallecimiento del conductor Sergi Swing. Nelson Groom se limitó a reaparecer, lo cual ya es un éxito tras más de un año apartado de las pistas. Segunda para el checo.

Además del éxito en la prueba principal, el binomio Alburquerque – Janacek saboreó las mieles del triunfo en la carrera de cierre, para potros no ganadores. Rea Silvia cerró el triplete del campeón de nuestros jinetes y puso el broche a una tarde inolvidable. La compañera de cuadra de Abdel, superaba a la puntera Denver Lass, en la recta final, marchándose en pos de la victoria con comodidad. La segunda posición era para Publicredit, que también superaba a la de la cuadra Chamartín, que finalmente se tenía que conformar con el tercer puesto. Novgorod alcanzaba la última plaza remunerada.

La jornada había empezado con la carrera para dos años, que se saldó con el brillante triunfo de Kiriko. El potro de Tolosana, que ya había mostrado buenas maneras en su debut, saldado con un tercer puesto frente a potros experimentados, marchó siempre muy cómodo y, una vez en la recta, mostró una bonita punta de velocidad a requerimiento de Crocquevieille. El reenganchado Fafel, que había dado un tirón al inicio de la recta, no tuvo capacidad alguna de respuesta y tuvo que conformarse con el segundo puesto, por delante del conductor Son Real, que mejoró mucho su discreto debut apuntando para futuros compromisos.

En el desdoblado asistimos al espectáculo de Vega de Castilla, que a sus ocho años alcanza el mayor valor de toda su vida con un nuevo triunfo, esta vez en primera parte, a punta de velocidad. Y eso que dicen que con la edad se pierden células rápidas. No serán los caballos. La yegua del Stand Carmo atacó por dentro y, aunque se abrió ligeramente, no llegó a molestar a Ahora No, si bien ésta, quizá porque se asustó, quizá por el esfuerzo, también se echó a su izquierda y provocó un bocadillo equino, toda vez que por ahí presentaban su ataque otros tres ejemplares, todos en un pañuelo. Finalmente el segundo puesto fue para Paniside, por delante de la propia Ahora No y de Devil Black, que empataron para el bronce,  precediendo a una Alabama que parecía venir a ganar a falta de doscientos metros.

Plural ya había estado a punto de ganar en su anterior salida, cuando fue neutralizado casi en la meta por Dublín Maura. En una segunda parte como la de ayer, ni los kilos pudieron frenar al de Ana Ímaz, que ganó de punta a punta de forma incontestable por lo que quiso Jimmy Martín. Detrás entraban los dos pupilos de Enrique Puente, Saro y La Moraña, cuya labor con este tipo de ejemplares es extraordinaria. La cuarta plaza fue para Vanity Fair, que no debe ser de esta categoría y no tardará en ganar.